Estuve enfermándome tanto últimamente que tuve tiempo para hacer esas cosas que uno siempre tiene en una eterna lista de “pendientes”. Entre ellas, tejer una bufanda y un gorrito para mi hija y hacer mi testamento digital. 🙂
Se trata de un documento en el que uno da los datos sobre cuentas y claves, y expresa su voluntad en cuanto a blogs, hosting, etc.
José Antonio Millán propone este modelo que me parece muy bueno pero al que yo amplié de acuerdo a la gran cantidad de actividades que tengo en línea:
Testamento digital
Firmado por [nombre] a tantos de tantos del 20**
Contraseñas generales
Contraseña de apertura del ordenador: ******
Correo Gmail: usuario ******, contraseña ******.
Acceso al banco (dirección ***): usuario ******, contraseña ******
Destrucción de contenidos
Quiero que se borren, sin que se mire el contenido, los siguientes directorios:
· Disco 1 (C:), subdirectorio ***: borrar íntegramente
· En el programa de correo Outlook: carpeta *** : borrar íntegramente
Destino de mis archivos
Una vez hechas estas dos cosas, lego el contenido de mi disco duro a la ciencia y la investigación (mensajes de correo incluido). Para el correo quiero un periodo sin que se toque de 15 años tras mi muerte
Blogs
Por favor: meted una nota en mis blogs diciendo que se acaba mi intervención (aunque me gustaría que permanecieran en línea).
Para ello hay que ir a Blogger: usuario: ******, contraseña: *****
Web
Idem de mi página web; me gustaría que quedara en línea. Para ello sólo hay que pagar al proveedor de alojamiento *** y renovar el dominio en el año 200**.
el problema con los blogs es
… que si no actualizas la version te lo hackean, asi que al morir hay que pedir que se convierta en html’s o algo asi.
te averiguo 😛
Irene… eso de “te averiguo” me da qué pensar… ¿vos no tenés planeado morirte, o al menos, no pensás morirte mientras tengas un blog hecho con WordPress?