Hace un tiempo alguien en una lista decía que es alérgico a las redes sociales.
Me la paso leyendo sobre gente que no quiere subirse al tren de Facebook, de Twitter o de tantas redes sociales libres, o al menos gratuitas, que inundan la red (GnewBook, por ejemplo)
Entiendo que algunos no quieran ser fotografiados en situaciones comprometidas y después estar en Facebook y ser el tema de conversación virtual del día; también entiendo que otras personas no quieran dejar sus datos en servidores de otros que pueden tener un maléfico plan con ellos.
Pero hay una realidad que no se puede negar: las redes sociales son un fenómeno que está superando lo que la gran mayoría de la humanidad esperaba de ellas.
Yo, por mi parte, las disfruto muchísimo.
Empezando por la enorme cantidad de inscriptos al SLyE que conoció el evento gracias a Facebook o Twitter, y siguiendo por el hecho de enterarme de cosas de todo el mundo (temblores en México, nevadas en Barcelona, etc.) relatados por los mismos protagonistas, hasta estar casi sentada al lado de gente (familiares, amigos) con quienes de otra manera no compartiría más que una reunión cada tanto (como lo escribí hace un tiempo, estas redes son para mí como sacar la silla a la vereda), o poder colaborar con la búsqueda de personas después de un terremoto.
Hoy empecé el día leyendo como siempre mi línea de tiempo de Twitter y vi dos cosas que me conmovieron: en lo micro, bien regional y vinculado con mi historia personal, el fallecimiento de Carlitos, el de “El amanecer de Carlitos”, donde iba a comer panqueques en Gesell, en Olivos y ahora en Villa del Parque. Y en lo macro, internacional y desvinculado de mi realidad cotidiana, cómo Twitter puede salvar vidas minuto a minuto gracias a una etiqueta que identifica las conversaciones sobre la frontera mexicana:
El gobierno de Reynosa acaba de abrir una cuenta oficial en Twitter en la que no pasa nada. ¿O sí? Lo que empezó siendo el canal oficial ha sido casi arrollado por los propios ciudadanos. Cita sin parar a otros tuiteros anónimos que informan sobre situaciones de peligro para la población. Aquí el principal peligro son los tiroteos diarios. ¿Cuántos? Varios todos los días. Conéctate al canal #Reynosa de Twitter y lo verás en directo. Inquietantes mensajes, unos con eufemismos y otros con consejos claros, brotan incluso de la cuenta oficial
Como dice Serrat… detrás está la gente.