Desde que surgieron las herramientas para editar archivos en línea de forma colaborativa, los usuarios de Gmail hemos vivido la emocionante conversión de ser unpluggeds a ser personas dependientes de la nube. Pero el nivel de felicidad fue decayendo paso a paso.
Primero fue Google Docs. Era muy fácil de usar; incluso cuando usábamos muchas veces los mismos archivos, bastaba con escribir algunas letras de su nombre para que apareciera en nuestro historial del navegador.
Un día dejó de ser Google Docs, para convertirse en Google Drive. Y se terminó la felicidad. Adiós a todo el entrenamiento de esas neuronas que descansaban en la rutina.
Google no nos está dejando tranquilos, llevando adelante cambios que todo lo empeoran, como el envío de mails de Gmail que es incómodo, no se puede utilizar sin insultar aunque sea un poquito.
En Google Drive, ahora no hay forma de encontrar un archivo, ya no aparecen en el historial del navegador, y ¡cuando uno busca no encuentra! ¿No era una herramienta de un famoso buscador? Y encima, si la idea no es trabajar en forma colaborativa, pierde frente a otros servicios de alojamiento en la nube porque además nos modifica los archivos, les quita formato, etc.
Chicos, chicos… ¿Quién les está aconsejando tantos cambios difíciles de digerir?
Cómo adaptarse a los cambios
Para comenzar a hacerse amigo de esta plataforma, algo que no hay que dejar de hacer el “pasear” el mouse por toda la pantalla, descubriendo que existen opciones donde nada parece indicar que las habrá.
Por ejemplo, al pasar el mouse por “Propietario”, vemos un menú que nos permite ver los archivos que uno mismo creó, o los últimos que modificó,
Si seguimos explorando descubrimos que podemos cambiar a modo “Cuadrícula” para ver los archivos como en una carpeta del escritorio.
A la izquierda podemos ver un menú con varias opciones sumamente interesantes, acerca de cómo ordenar, qué ver y qué no ver.
Pero lo más interesante de ese menú, que nos salva a la hora de encontrar archivos, es la posibilidad de crear carpetas (¡Al fin Google reconoce que las carpetas sirven para algo!).
Una vez que creamos una carpeta, seleccionamos uno o más archivos y elegimos “Mover”, nos muestra una lista de carpetas, y elegimos a cuál de ellas debe ir lo seleccionado.